La OIMT destaca el potencial de las maderas menos utilizadas en medio del turbulento comercio mundial

24 de junio de 2025, Yokohama

El Dr. Mohammed Nurudeen Iddrisu, Director de Comercio e Industria de la OIMT, pronuncia un discurso en la conferencia del IRG56, celebrada en Yokohama, Japón, el 23 de junio de 2025. Fotografía: Paula Sarigumba/OIMT

Las especies maderables tropicales menos utilizadas constituyen una oportunidad para que los países tropicales amplíen su producción y comercio de madera y productos madereros sostenibles a fin de satisfacer la demanda del mercado. La investigación sobre la durabilidad de las especies maderables y productos derivados ayuda a los productores a diversificar las aplicaciones de las maderas tropicales.

Éstos fueron algunos de los mensajes pronunciados por el Director de Comercio e Industria de la OIMT, Dr. Mohammed Nurudeen Iddrisu, en un discurso de fondo de la 56ª conferencia del Grupo Internacional de Investigación sobre la Protección de Madera (IRG56), celebrada en Yokohama, Japón, del 22 al 26 de junio de 2025.

La conferencia fue organizada por el Grupo Internacional de Investigación sobre la Protección de la Madera (IRG-WP), una red de científicos y empresas que trabajan para prolongar la vida útil de los productos de madera frente a amenazas como el deterioro, las plagas y el fuego.

En una presentación titulada «Protección de la madera en los trópicos: Una necesidad frente al cambio climático y la creciente demanda de consumo de productos madereros», el Dr. Iddrisu ofreció en primer lugar al público experto una visión general de la OIMT y de la situación actual de los bosques tropicales y la industria maderera tropical.

Los bosques tropicales representan alrededor del 45% de todos los bosques del planeta y ocupan un total de 1.830 millones de hectáreas. Además, los bosques tropicales proporcionan medios de subsistencia a unos 1.600 millones de personas y, al mismo tiempo, desempeñan un papel fundamental en el secuestro y almacenamiento de carbono y la conservación de la biodiversidad. Sin embargo, la pérdida de unos 10 millones de hectáreas al año persiste, señaló el Dr. Iddrisu, subrayando la necesidad de una ordenación forestal sostenible (OFS).

El mercado de las maderas tropicales ha experimentado un fuerte crecimiento, impulsado principalmente por la demanda de sectores como la construcción en los países desarrollados, pero también por el auge de China y el crecimiento de la clase media en los países en desarrollo.

Valor agregado

Mientras que países como Papua Nueva Guinea y las Islas Salomón se destacan como exportadores de trozas tropicales, el Dr. Iddrisu subrayó cómo China, Viet Nam y otros países han creado industrias de transformación multimillonarias que suman valor agregado a las exportaciones de maderas tropicales.

«Viet Nam es un modelo», afirmó el Dr. Iddrisu. «Con la adición de valor, en realidad se exporta menos volumen, pero se obtiene más valor. Eso significa que puedes proporcionar bienes y servicios a tu gente y también expandir tu economía.»

La Sala Anexa de Pacífico-Yokohama se colmó de investigadores y científicos que trabajan en la protección de la madera contra amenazas como el deterioro, las plagas y el fuego. Fotografía: Paula Sarigumba/OIMT

Desafío normativo

Con respecto a los desafíos de la actualidad, el Dr. Iddrisu destacó la normativa diseñada para impedir la importación de madera producida de forma ilegal o insostenible en los mercados desarrollados, especialmente en la Unión Europea.

Mientras que Indonesia, un actor importante en el comercio de maderas tropicales, exportó la primera madera con licencia FLEGT en noviembre de 2016, países como Ghana han estado trabajando durante años en la legalidad de la madera y en sistemas de seguimiento para asegurar su licencia FLEGT con el fin de exportar madera a la Unión Europea. El nuevo Reglamento de la UE sobre deforestación (EUDR) de alguna manera ha «cambiado los objetivos y supondrá un desafío para el continente africano», señaló.

La intensificación de la geopolítica actual enturbia las perspectivas del comercio mundial de maderas tropicales. Por un lado, hay disturbios y conflictos en curso en Europa del Este y el Oriente Medio; por otro, las políticas comerciales proteccionistas, que imponen aranceles a muchas importaciones en mercados críticos, plantean problemas comerciales a muchos países miembros de la OIMT.

«Muchos miembros productores de la OIMT están tratando de ver qué pueden hacer para poder mantenerse a flote, seguir produciendo, exportando, generando ingresos y satisfacer las necesidades de sus bosques y su gente», afirmó el Dr. Iddrisu.

El problemático mercado de la construcción de viviendas en China, el mayor importador mundial de maderas duras tropicales, es otro motivo de preocupación para los exportadores, añadió.

Para ayudar a los miembros a hacer frente a estos desafíos, el Dr. Iddrisu explicó que la OIMT elabora directrices normativas para fomentar la gestión forestal sostenible y las industrias sostenibles de maderas tropicales y ha financiado más de 1200 proyectos y actividades, muchos de ellos sobre el terreno, para ayudarles a aplicar las políticas y prácticas conexas.

La Organización también recopila y difunde datos para informar sobre el comercio y las políticas relativas a las maderas tropicales, y apoya a sus miembros mediante el desarrollo de capacidades en materia de silvicultura y comercio sostenible de maderas tropicales.

«Miramos hacia el futuro de los bosques tropicales, y creemos que mantener el flujo de madera sin deforestación es el mejor camino a seguir», afirmó.

El Director de Comercio e Industria de la OIMT, Dr. Mohammed Nurudeen Iddrisu, y el ex Presidente del IRG-WP, Profesor Joris Van Acker, durante la 56ª conferencia del IRG-WP. Fotografía: Paula Sarigumba/OIMT

Diversificación de las especies maderables

El Dr. Iddrisu señaló que actualmente solo se exporta como madera una fracción de las especies arbóreas que se encuentran en los bosques tropicales de gran diversidad, y que las especies menos utilizadas tienen el potencial de aumentar la producción, apoyando la diversificación de las especies sin comprometer la sostenibilidad.

"Si se aumenta el valor agregado a estas especies menos utilizadas, algunas de ellas pueden tener propiedades similares a las comercializadas, por lo que estamos trabajando en la expansión y ampliación de la base de uso de las especies", afirmó.

El Dr. Iddrisu sugirió que la experiencia del IRG-WP en la investigación de las características de los distintos tipos de madera, el aumento de su protección y, por ende, el fomento del uso eficiente de la madera, podría servir de apoyo a la gestión forestal sostenible.

«Creo que es aquí donde la OIMT y (el IRG-WP) pueden establecer algún tipo de colaboración», explicó.

«La OIMT valora la colaboración abierta en la investigación y trata de vincular la ciencia con los resultados del mundo real», señaló la Directora Ejecutiva de la OIMT, Sheam Satkuru. «Somos proactivos en la búsqueda de alianzas potenciales con entidades de investigación, como los miembros del IRG-WP, para ayudar a convertir los conocimientos en acciones concretas con miras a la gestión sostenible de los bosques tropicales y el comercio legal de sus recursos.»